Buenos Aires.- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, insistió hoy en relacionar a Estados Unidos con el intento de golpe de Estado contra Rafael Correa en Ecuador y aseguró que la condena de Unasur constituye una “lección” para los “fascistas”, antes de abandonar Buenos Aires con destino a Caracas.
“No tengo duda”, afirmó el líder bolivariano preguntado sobre si pensaba que Estados Unidos estaba detrás de la sublevación contra Correa.
“No puedo señalar a nadie en particular, pero no tengo duda en señalar a las fuerzas fascistas de este continente, las mismas que arremetieron contra (Manuel) Zelaya (ex presidente de Honduras), contra nosotros…, la burguesía, los pitiyanquis y más allá el imperio yanqui, que pretende detener el renacimiento de América Latina y el Caribe”, declaró en el aeropuerto de Buenos Aires antes de abordar el avión de regreso a Caracas.
Chávez, que participó esta madrugada en la reunión de urgencia de Unasur convocada en la capital argentina para analizar la crisis abierta en Ecuador por la sublevación contra Correa, se mostró convencido de que la contundente reacción del organismo ha dado una “clara lección a los fascistas de este continente, que están agazapados como las hienas detrás de esta comunidad”.
A su juicio, también tras el golpe contra Zelaya perpetrado en Honduras en junio de 2009 los países de la región se movieron rápido y fueron contundentes en su condena, pero, a diferencia de lo ocurrido en Ecuador, “los militares hondureños se alinearon al golpe, subordinándose al mandato imperial”.
En este sentido, Chávez llamó a los soldados de América Latina a respetar el orden constitucional de sus países y se preguntó “hasta cuándo las Fuerzas Armadas de este continente van a seguir actuando como gorilas contra sus pueblos, como lacayos contra sus pueblos”.
“Los militares estamos para defender los intereses de nuestros pueblos, la Constitución y no para ponernos al servicio del imperio yanqui”, insistió.
Chávez fue el último de los participantes en la reunión de urgencia de Unasur en abandonar Buenos Aires.
La reunión, convocada por la presidenta, Cristina Fernández, y su esposo y antecesor en el cargo, Néstor Kirchner, en su calidad de secretario general de Unasur, concluyó con una condena contundente al intento de golpe contra Correa y una advertencia clara de los gobiernos de la región para alejar tentaciones golpistas en el futuro.
En la declaración de Buenos Aires, los presidentes de Unasur advierten que “no tolerarán bajo ningún concepto cualquier nuevo desafío a la autoridad constitucional ni intento de golpe al poder civil legítimamente elegido”.
“En caso de nuevos quiebres, adoptarán medias concretas e inmediatas, tales como cierres de fronteras, suspensión del comercio, tráfico aéreo, provisión de energía y servicios”, afirman.
Además, los mandatarios acordaron enviar hoy a sus cancilleres a Quito para reforzar el respaldo del bloque a Correa.
“No tengo duda”, afirmó el líder bolivariano preguntado sobre si pensaba que Estados Unidos estaba detrás de la sublevación contra Correa.
“No puedo señalar a nadie en particular, pero no tengo duda en señalar a las fuerzas fascistas de este continente, las mismas que arremetieron contra (Manuel) Zelaya (ex presidente de Honduras), contra nosotros…, la burguesía, los pitiyanquis y más allá el imperio yanqui, que pretende detener el renacimiento de América Latina y el Caribe”, declaró en el aeropuerto de Buenos Aires antes de abordar el avión de regreso a Caracas.
Chávez, que participó esta madrugada en la reunión de urgencia de Unasur convocada en la capital argentina para analizar la crisis abierta en Ecuador por la sublevación contra Correa, se mostró convencido de que la contundente reacción del organismo ha dado una “clara lección a los fascistas de este continente, que están agazapados como las hienas detrás de esta comunidad”.
A su juicio, también tras el golpe contra Zelaya perpetrado en Honduras en junio de 2009 los países de la región se movieron rápido y fueron contundentes en su condena, pero, a diferencia de lo ocurrido en Ecuador, “los militares hondureños se alinearon al golpe, subordinándose al mandato imperial”.
En este sentido, Chávez llamó a los soldados de América Latina a respetar el orden constitucional de sus países y se preguntó “hasta cuándo las Fuerzas Armadas de este continente van a seguir actuando como gorilas contra sus pueblos, como lacayos contra sus pueblos”.
“Los militares estamos para defender los intereses de nuestros pueblos, la Constitución y no para ponernos al servicio del imperio yanqui”, insistió.
Chávez fue el último de los participantes en la reunión de urgencia de Unasur en abandonar Buenos Aires.
La reunión, convocada por la presidenta, Cristina Fernández, y su esposo y antecesor en el cargo, Néstor Kirchner, en su calidad de secretario general de Unasur, concluyó con una condena contundente al intento de golpe contra Correa y una advertencia clara de los gobiernos de la región para alejar tentaciones golpistas en el futuro.
En la declaración de Buenos Aires, los presidentes de Unasur advierten que “no tolerarán bajo ningún concepto cualquier nuevo desafío a la autoridad constitucional ni intento de golpe al poder civil legítimamente elegido”.
“En caso de nuevos quiebres, adoptarán medias concretas e inmediatas, tales como cierres de fronteras, suspensión del comercio, tráfico aéreo, provisión de energía y servicios”, afirman.
Además, los mandatarios acordaron enviar hoy a sus cancilleres a Quito para reforzar el respaldo del bloque a Correa.
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